La Universidad de Chile anda imparable en la Copa Libertadores y su buen presente ha puesto en alerta a sus rivales. Si bien el torneo continental aún está en sus primeras etapas, el nivel mostrado por el equipo de Gustavo Álvarez ha generado una respuesta contundente por parte de aquellos que se enfrentarán a los chilenos. ¿Qué está pasando?
🤔 ¿Por qué tanto revuelo?
Los azules marchan como líderes absolutos del Grupo A, con un desempeño que nadie esperaba. Dejando atrás a rivales de peso como Estudiantes de La Plata y, precisamente, Botafogo, la “U” se ha convertido en la escuadra a vencer en esta fase del certamen. Su juego ha sido efectivo y ha demostrado que son un equipo peligroso, sobre todo jugando de local.
💥 La medida desesperada del Fogão
Todo esto ha llevado al club carioca a tomar una decisión sorprendente para el duelo crucial que se avecina frente a los universitarios. A pesar de lo que pueda parecer, esta no es una medida futbolística, sino de planificación. En una movida inesperada, Botafogo solicitó y consiguió que se suspenda su partido por el Campeonato Brasileño ante Ceará, programado para el fin de semana previo al choque con la “U”.
🗓️ Priorizando la batalla de Chile
La razón es simple: el cuerpo técnico de Botafogo quiere llegar con la mayor cantidad de energía y descanso posible al enfrentamiento con el equipo chileno. Entienden que este partido es vital para sus chances de avanzar a la siguiente ronda, y no se quieren arriesgar a llegar desgastados. ¡Van con todo!
💪 Un plan de juego bien aceitado
Con la programación alterada, el “Fogão” tendrá a Capital Clube por la Copa de Brasil como último compromiso antes de recibir a la “U” el 22 de mayo. Incluso, se especula con la posibilidad de que el entrenador reserve a sus titulares en ese encuentro para que lleguen frescos y en óptimas condiciones al juego frente al Romántico Viajero.
🇨🇱 La U responde en la cancha
La “U”, por su parte, se prepara a su ritmo para este desafío. Allí, Lucas Assadi y compañía se preparan para la batalla en suelo brasileño, arriba de sus posibilidades en el torneo. El equipo sabe que un buen resultado en Rió de Janeiro podría sentenciar la clasificación a los octavos de final. La expectativa es máxima, y la afición azul espera lo mejor de sus jugadores.
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