La Universidad Católica enfrenta una situación crítica en su temporada 2025, tras una nueva derrota que ha disparado las alarmas en el club. La reciente eliminación en la Copa Chile a manos de San Luis, donde cayeron 3-2 en un partido crucial, ha dejado a los hinchas y a los analistas cuestionando el futuro del técnico Tiago Nunes. Con estos resultados desfavorables, la presión sobre el entrenador ha aumentado considerablemente.
El tropiezo ante San Luis no solo significó la eliminación, sino que subrayó una serie de fracasos que han marcado el paso de Nunes al mando del equipo. Desde su llegada, la UC ha mostrado un rendimiento inconsistente, lo que ha causado descontento entre los fanáticos y expertos del fútbol. La eliminación en la fase previa de la Copa Sudamericana y ahora en la Copa Chile, ha llevado a muchos a cuestionar si el brasileño debería continuar en su puesto.
Miguel Ángel Neira, exjugador de la UC, ha comparado la situación del equipo con la del seleccionador nacional Ricardo Gareca, sugiriendo que Tiago Nunes podría aferrarse a su cargo de manera similar. Se ha planteado que "no creo que Tiago Nunes renuncie", lo que ha suscitado aún más debate sobre su futuro. Neira afirma que la dirigencia del club debe tomar una decisión, ya que el equipo no puede seguir de esta manera, indicando que "Universidad Católica lo tiene que echar o que se vayan los dirigentes de Cruzados".
El desempeño de Nunes en la UC se traduce en 39 partidos dirigidos, con un saldo de 17 victorias, 9 empates y 13 derrotas. Este bajo rendimiento ha impulsado a muchos seguidores a exigir cambios inmediatos. La situación es insostenible para aquellos que han apoyado al técnico, quienes ahora demandan una respuesta efectiva de la dirigencia.
El exjugador también se ha mostrado crítico con el rendimiento del equipo en general, señalando que "el resultado es un desastre", haciendo referencia a que un plantel de la UC no debería perder contra un equipo de Primera B, pues los jugadores de la Católica suelen recibir salarios que superan ampliamente lo que ganan los otros equipos locales.
A pesar de la presión externa, Nunes se aferra a su contrato y ha manifestado su deseo de cambiar la situación. La próxima prueba para el brasileño será un partido clave contra Cobresal, que se llevará a cabo el 12 de abril. Este encuentro podría ser determinante no solo para sus aspiraciones en el torneo, sino también para su futuro como director técnico de la Universidad Católica.
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